Laura Collín, antropóloga y académica argen-mex, se encuentra presentando su libro Economía Solidaria un capitalismo moralizante o un movimiento contracultural. Collín, avecindada en México desde 1976, expone un modelo teórico que se encuentra en construcción pero que, advierte a La Coperacha, “ya polemiza con el marxismo y con el cooperativismo”.
Se ha escuchado en tus presentaciones que el modelo de la economía solidaria es incompleto y sirve de poco
No sirve de poco, la lógica reproductiva de la economía solidaria, ha sido una lógica que ha funcionado en la historia de la humanidad y ha sido el sustento de las sociedades de toda la vida. Y es la alternativa para el post industrialismo. Hay una crisis civilizatoria, una concentración de la riqueza, una destrucción del medio ambiente y una destrucción del ser humano.
Este modelo está agotado, la cosa es ¿hacia donde transitamos? ¿De vuelta hacia el estado de bienestar? Donde papá gobierno nos resuelve todo; hay estabilidad en el empleo, jubilación, educación pública, salud pública, ¿o transitamos hacia un modelo de lógica reproductiva?
En este modelo de economía local, hay una inquietud que surge de inmediato: ¿dónde queda el comercio exterior? ¿Dónde la tecnología? y en general, ¿cómo se resuelve la conexión con el mundo externo?
La propuesta es: todo lo que se pueda producir localmente, producirlo localmente, aquello que por condiciones naturales, geográficas o demás, tendrá que ser importado, pero es ridículo que estemos importando leche cuando se puede producir aquí o maíz cuando se puede producir aquí, o zapatos, por decir una cuestión industrial.
Entonces tener condiciones de autosuficiencia, en aquello que se puede producir localmente y el excedente utilizarlo para el comercio exterior pero minimizarlo, no como es ahorita, que todo es importado y lo mínimo es consumo local.
En cuanto a la tecnología, nadie está en contra de la tecnología, al contrario, tiene que estar al servicio de la descentralización.
La tecnología actual tiende a la descentralización. Si uno utiliza energía eólica funciona mejor a nivel local, que con una gran concentración como la barbaridad que están haciendo en el Istmo, o sea, no la puedes concentrar.
¿Por que no hacer tecnología que nos permita descentralizar la producción a nivel local para crear economías locales sanas?
Otra inquietud que surge en la presentación de tu libro, es el orden político, ¿dónde conecta la transformación política con este modelo?
Construir poder popular. Cuando una comunidad logra tener condiciones de autosuficiencia y de autonomía, ya no le pide nada al gobierno, sino que negocia en pie de igual a igual. Y esta experiencia ya la tenemos en México, productivamente con la Tosepan (cooperativa de la Sierra Norte de Puebla) , en caso de defensa con la CRAC (Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias del estado de Guerrero) . La construcción del poder popular, es construir desde lo local, que es diferente a la toma del poder vía elecciones. Lo que hemos visto en la experiencia histórica del último tiempo, es que cuando la izquierda llega al poder se convierte en neoliberal.
¿Cómo miras la experiencia de los caracoles zapatistas en Chiapas?
Lo que ellos están haciendo es una experiencia de autonomía y eso es exactamente lo que estamos planteando como modelo. Creo que es una de las grandes experiencias de este momento, el tratar de construir a partir de lo local las relaciones de interdependencia y no pedirle nada al estado.
Laura, ¿qué es lo que no te gusta de las cooperativas?
Que necesariamente tienen que producir mercancías, y al entrar al mercado tienen que producir más con menos, eso significa depredar la naturaleza y significa explotar el trabajo humano. Muchas cooperativas tienen empleados que explotan, como Mondragón (corporación de cooperativas del País Vasco) y muchas otras.
Las cooperativas son solidarias hacia adentro, capitalistas hacia fuera, funcionan con la lógica de la reproducción ampliada del capital, la producción para el mercado, que es lo que yo planteo que es el núcleo del capitalismo, más que la propiedad privada de los medios de producción, como dice el marxismo.
¿Y de las experiencias de cooperativas pequeñas que no tienen una gran vinculación al mercado?
Son mejores, pero siempre que le apuesten al mercado externo en vez de lo local, estás dependiendo de ese mercado. Como el caso del café, fue una experiencia exitosa, pero ahora que Europa está en crisis, ellos también están en crisis. En cambio el mercado local, si el dinero circula internamente, es un mercado mucho más seguro.
El modelo teórico de economía solidaria, que está en construcción, debe contemplar lo local, lo diverso y lo interdependiente. De esta manera va a ser mayoritariamente autosuficiente y eso va a generar condiciones de autonomía.
Fuente: La Coperacha
Asociación Civil fundada en 1967, integrada por profesionales especializados en cooperativas y mutuales.
Pioneros en Balance Social Cooperativo y Mutual.